YANNI, EL AMO DE LOS SINTETIZADORES

El otro día cuando hablé de Jerry Goodman, de Ramón Trecet y su programa Diálogos 3, olvidé comentar que en aquel ligero repunte de la música New Age, entre finales de los 80 y comienzos de los 90, imagino que Ramón Trecet tendría mano en Televisión Española porque consiguió un espacio en esa cadena donde, de algún modo, ilustraba con imágenes a los artistas y grupos más sonados y prestigiosos. El programa se llamaba Música NA y lo echaban en la primera cadena los sábados de madrugada, a eso de las doce y media o la una.

Este programa nos traía reportajes y entrevistas de producción propia, y el equipo de este programa se desplazaba generalmente a Estados Unidos, cuna de la música New Age. Y es que me acordé de una de estas entrevistas en su estudio de grabación, del compositor que traigo a colación esta semana, se trata del griego Yanni.

Seguramente lo que siempre me llamó la atención de Yanni fue su estética, un tipo con pelo larguísimo y buen mostacho, por cierto que ahora con unos añitos de más se ha quitado el bigote y se recortado la melena. Estos y otros detalles y, por supuesto, su música lo hacían ser un compositor singular.

De algún modo, Yanni tiene el honor de ser de los artistas, que se cuentan con los dedos de una mano, que le dio la vertiente moderna, de vanguardia a la New Age, por ser de los pioneros en utilizar el ordenador. De hecho, cuando hablamos del sintetizador, un aparato electrónico que fabrica música artificialmente a través de un programa de software, este músico fue de los iniciadores de esta corriente.

Alguien podría ser crítico con esta música por los atajos para construirla. Yo siempre he sido de la opinión de que hay que mirar el producto final y si este es bueno o genial, queda sobradamente justificada su concepción. La música de Yanni siempre me ha inspirado mucho, me ha transportado a otro lugar, me ha liberado de tensiones y conseguir esto aunque sólo sea por unos segundos ya es válido para que yo califique el legado de Yanni como excepcional.

Casi en paralelo a la potencia musical de Yanni, aparecen detalles en su vida que, dentro de las limitaciones de este tipo de música, algo a lo que siempre aludo, hacen que este griego sea algo famosillo.

Para empezar diré que como ocurre como muchos otros compositores modernos, tiene una formación de base que no tiene relación exacta con la música. Habiendo sido un joven atlético y excelente nadador en su Grecia natal, Giannis Chrysomallis llegó a batir el récord de 50 metros libres en su país; con 18 años, en 1973, decide irse a estudiar Psicología a Estados Unidos, y termina con éxito sus estudios.

Aunque comienza a alternar su carrera intelectual con la musical, la primera curiosidad de Yanni es que jamás realizó estudios musicales y desde un inicio se creó su propio sistema de notación, es decir, que le dan una partitura y como si le dieran un texto en chino. Pero eso no le impidió el hacerse poco a poco un sitio en el panorama musical de la New Age.

El hecho por el que es más famoso, es por su relación con la actriz Linda Evans una de las protagonistas del culebrón estadounidense Dinastía (foto que acompaña esta entrada). Quiero aventurarme a pensar que con una guapa y millonaria mujer, su cuenta corriente le permitió investigar todo lo que se le ocurría en su estudio de grabación. Y la verdad es que hizo auténticas obras de arte. Quizá trascendiera por encima de cualquier trabajo su “Live at the Acropolis”, grabado en 1993 en directo, en el Teatro Herodes de Atenas, un vestigio de la arquitectura griega clásica, que con no pocos problemas las autoridades griegas accedieron a permitir. Se convirtió en su seña de identidad y todavía hoy se pueden ver en Internet con facilidad imágenes de aquel mítico concierto.

Es posible que las mujeres pudieran encontrar atractivo a Yanni, yo de hombres no entiendo, pero lo cierto es que un aura de seductor y rompecorazones recubre a este artista; pues después de cortar con Linda Evans tras nueve años de relación; probó suerte con otra bella mujer, la modelo boliviana Silvia Barthes. En 2006 ella le acusó de maltrato y rompió esa relación, por cierto, la causa se archivó. Se comenta que esta ruptura le afectó profundamente al griego y que a partir de ahí tenemos un nuevo Yanni, de hecho, su afeitado de bigote y recorte de melena se le atribuye a este incidente.

Sin duda, Yanni es uno de los grandes de la música New Age, millones de personas han escuchado su música alguna vez a través de sintonías, anuncios..., otra cosa distinta es que se la sepa atribuir. Yo me quedo con tres perfectas canciones para acompañar una tarde lluviosa al calor de una lumbre y leyendo un buen libro: “Nostalgia”, “Standing in motion” y Within Atraction”.

Comentarios

Anónimo ha dicho que…
Ay, encontré tu artículo por casualidad y me parece bastante correcto; Yanni es mi musico favorito y jamás podremos desconocer que talento, arte y genialidad le sobran, no por nada se ha hecho de los mejores musicos para acompañarle... :)
Saludos,
Matuasta.
Juliusone ha dicho que…
EXCELENTE MUSICO..y muchas gracias por el articulo.
Anónimo ha dicho que…
Pues le ha caido muy bien ese aislamiento porque el re aparecimiento con está nueva imagen le hace ver mucho mejor.. Incluso el espectáculo ahora vocalizado es espectacular! linda quizá no se superaba los 20 pero los recupero luego con la casi -20. Es igual, ahora se ve muy muy bien.