"ESTA NOCHE DIME QUE ME QUIERES", DE FEDERICO MOCCIA

Nunca acostumbro a indagar en la vida de los escritores que leo por primera vez hasta que no termino su novela, en este caso también ha sido así, y acudiendo a Internet tras la conveniente lectura de esta obra, me ha confirmado lo que sospechaba acerca del perfil y antecedentes de este Federico Moccia, del que hasta hace unas semanas sólo sabía que era un escritor italiano de cierto éxito y que sus novelas tenían una portadas llamativas y peculiares.

Sus novelas son actuales, con gente de hoy y problemas de hoy, al menos esta que yo he leído, aunque me imagino que también las otras que ha escrito. Y, por cierto, que el encumbramiento vino con sus obras anteriores. Se nota claramente que Moccia viene de la televisión, es un consumado guionista, y en sus obras no lo puede esconder, ese era el origen de mi confirmada sospecha. Esta novela tiene una velocidad narrativa y un planteamiento que encajaría perfectamente en un formato televisivo o incluso en el cine.

Apenas pasas unas pocas páginas, que te sitúan sin ningún problema en la acción principal, la novela te engancha y te absorbe de forma progresiva, lo cual es muy de agradecer porque con una narración muy activa y visual, te ves sumergido en la vida de los personajes, en sus casas, en la calle, en cada una de sus vivencias.

La obra se inicia con el relato de dos historias inconexas entre sí que terminan coincidiendo y la trama es muy fácil de seguir en todo momento. En este sentido, Tancredi es un sexy multimillonario, seguro de sí mismo, controlador hasta la saciedad y abiertamente podemos decir que es un auténtico sinvergüenza. Este empresario multidisciplinar cuenta entre su espléndido séquito con Gregorio Savini, veterano hombre para todo que permite hacer realidad las fantasías de su jefe. Tancredi acostumbrado a conseguir todo lo que desea, especialmente mujeres, y a toda costa, se encontrará con la bella Sofia, que se revelará como la conquista más complicada que jamás haya tenido que afrontar.

Sofia, por su parte, llevaba una vida aparentemente normal, salvo que hace unos años, su pareja, el arquitecto Andrea, tuvo un accidente de motocicleta, provocado indirectamente por la propia Sofia, que le lleva a quedar postrado en una silla de ruedas. Eso no resultó un impedimento para ambos, que después del accidente contrajeron matrimonio. No obstante, aquel incidente marcó la vida profesional de Sofia, una excepcional pianista, que hizo una especie de pacto con Dios para no volver a tocar en concierto, dedicándose por entero a la docencia, frustrante a todas luces.

El punto de inflexión llega cuando Tancredi y Sofia se encuentran casualmente, y desde el primer momento Sofia será el objetivo de Tancredi. El potentado hombre de negocios utilizará todos sus recursos para conquistar a la atractiva Sofia, y los métodos son fabulosos e insospechados, aunque aun así no logrará acceder a ella de primeras.

Tancredi dará una vuelta de tuerca proponiéndole un trato que cuesta cinco millones de euros, cantidad que servirá para pagar una sofisticada operación que ha de devolver la movilidad a Andrea, a cambio claro está de que Sofia pase unos días con Tancredi.

Sofia terminará por hacer de su capa un sayo y se dejará llevar por la pasión en un escenario paradisíaco, cuando a los ojos de todos y particularmente de su familia, estará dando unos conciertos en los Emiratos Árabes. Dicha estancia es la parte más pasional de la narración, pero también es destacable el lujo con el que describe el escritor lugares desconocidos para la mayoría de los mortales y que por un momento uno sueña con estar allí.

También es cierto que aparte de la pasión, habrá momento para la indagación en la realidad de los dos personajes principales, y fundamentalmente se desvelará el misterio de por qué Tancredi no quiere a las mujeres, o más exactamente por qué no puede tener una relación estable con ellas.

La novela es muy entretenida, con su principio, su trama y su final, todo muy bien estructurado, y repito, muy fácil de leer, y además tienes necesidad de avanzar para ver cómo se desenreda todo, luego desde el punto de vista del entretenimiento y del hilo narrativo nada que objetar.

Sorprenden, eso sí, algunos hechos, probablemente el que más me ha llamado la atención ha sido la extraña similitud entre el esquema del libro y la película (mucho más antigua) «Una proposición indecente» de Adrian Lyne, con Robert Redford y Demi Moore como actores principales. Es decir, un multimillonario pagará un millón de dólares por pasar una noche con una guapa chica, casada con un arquitecto (Woody Harrelson), como en esta novela, dándose la circunstancia de que también esta pareja tiene una necesidad económica. Es demasiado coincidente, pero es más, ¿qué necesidad tenía Federico Moccia de otorgarle la misma profesión al infortunado y «cornudo» circunstancial del marido?

También escama un poco que Sofia, como el personaje de Demi Moore en la película, se deje llevar por la pasión, aunque haya dinero de por medio, no tenían necesidad de eso, pero a ambas les puede el instinto, demasiado.

Por último, el final que, como siempre, no voy a desvelar, es algo desconcertante, vacío para mí, si se le quiere llamar así, pero bueno, es el que ha propuesto el escritor, nada que reprochar.

En definitiva, una buena novela de verano, rápida de leer y que nos ayuda mucho a despertar la imaginación, bastará con poner la mente en modo serie de televisión y nos saldrá todo bastante fácil, las caras, los lugares, las islas, los pasajes principales.

Comentarios