MICHEL PÉPÉ, EL MÚSICO EN COMUNIÓN CON LA NATURALEZA

Me he pasado buena parte de este verano ocupando mis ratos de ocio con sensacional música ambiental y el nombre que más ha aparecido en mis selecciones ha sido este Michel Pépé, sobre todo porque no decepcionaba, no tenía un gran tema principal para después bajar, no, se mantenía en una especie de homogeneidad musical que siempre permite que aciertes con lo que escuchas. Ya sabes que es música ambiental con pequeñas variaciones hacia otros tipos de música relajante, entre la New Age, cósmica, étnica y eclesial.

Y digo lo de ambiental quizá con más acentuación que otros compositores que he traído a esta bitácora, porque el medio ambiente y la naturaleza están presentes en el imponente trabajo de este francés, no demasiado conocido bien es cierto, aunque muy valorado en los exclusivos, por reducidos, círculos de esta corriente musical.

La naturaleza como hito para proporcionar relajación al ser humano ha sido la máxima de este parisino con raíces italianas que desde bien joven orientó su futuro hacia la música. Comenzó por los instrumentos clásicos y tuvo un punto de inflexión en su vida cuando descubrió las propiedades terapéuticas que podían generar determinadas músicas, y culminada su formación clásica fue cuando igualmente se dejó tentar por la llamada de la electrónica y su aportación al propósito que comenzó a perseguir y que yo he tratado, bajo mi punto de vista, de resumir de la siguiente forma, se trata de una música que proporciona energía para derivar en paz interior.

Su aparición en el panorama musical tuvo lugar a principios de los 90, es decir, en el que podemos decir el momento dulce de las nuevas músicas en el mundo occidental, cuando los Michael Nyman, Enya, Vangelis o Jean Michel Jarre, salvando las distancias y su matiz populista y comercial, conseguían colarse en radios y televisiones de medio mundo. Por cierto, hay un dato sustancial de este compositor y es que es relativamante joven, nace en 1962, y está plenamente activo en la actualidad, cumpliendo con una especie de autoimposición de editar un disco con una periodicidad anual.

El proyecto musical de Pépé fue madurando con el tiempo, la conjunción de música electrónica, donde el sintetizador es el monarca absoluto, y los instrumentos clásicos que él conocía por su formación, poco a poco sufrió un incremento familiar con la incorporación de otros muchos instrumentos, incluso étnicos, de cara a ese fin de fusionar música y naturaleza; así en su nómina instrumental se cuenta la flauta de pan, flauta irlandesa, violín, arpa, oboe, santur (instrumento de cuerda percutida de origen oriental) sitar indio, cuencos tibetanos...

Muy preocupado por esas propiedades terapéuticas de la música, se sentía especialmente conmovido por muchas personas que acuden a este arte como un modo de liberación y hasta de descargar la ira. La música muy alta, los sonidos estridentes, los decibelios excesivos a la par que insanos, entiende que no debieran ser el cometido de la música, de algún modo, tiene un componente negativo, y esto no hace más que posicionarse en el subconsciente de las personas, en su fuero interno.

En contraposición a eso está la naturaleza, los sonidos de la misma, a veces rayanos con el silencio, la esencia de todo ser, pues ante todo el ser humano es un animal de la naturaleza, racional bien es cierto, pero natural ante todo. Esa introspección le hizo llegar a esta música melódica y espiritual, como un modo de equilibrar nuestra salud mental y física, un apoyo para nuestro ser.

Es inevitable, pues, que la música de este francés esté muy asociada a la relajación y, de hecho, es un recurso muy utilizando en muchos gimnasios actuales donde uno se convence de que esa música que emana de no se sabe bien dónde, coadyuva para que puedas cultivar tu cuerpo en unas condiciones óptimas.

Desde luego Pépé entendió muy bien desde sus orígenes en la música, que esta representaba el auténtico lenguaje universal de la humanidad, algo en lo que coincide con sus coetáneos de este siglo, pero también era una velada afirmación que sostenían los clásicos. Sin duda que las palabras contienen una carga negativa o positiva en función de cómo se diga y lo que significan, incluso las positivas hasta pueden malinterpretarse, hay gente para todo, pero la música es unídireccional, sobre todo la melódica, la que no tiene letra; un sonido dulce sólo puede evocar en el subconsciente buenas sensaciones, siempre positivas, cercanas a la felicidad. Y es que la música no engaña y llega adonde tiene que llegar.

Michel Pépé quiere transmitir con su música un torrente de paz y serenidad, algo que pueda ajustarse al alma aunque sea de forma inconsciente, porque eso terminará liberando su profunda fuerza terapéutica, esa que disuelve las tensiones de nuestro quehacer diario, y que a veces todos necesitamos. Mucho se ha hablado del poder curativo a este respecto, yo no voy a hacer una tesis de esto, pero con que pueda puntualmente relajarte y suponer un pequeño momento de placer, yo me doy por satisfecho.

Curiosamente, si la New Age como tal está algo denostada, las músicas de meditación, como la de Michel Pépé, creo que van a ir creciendo en la conciencia de las grandes ciudades, como contrapunto, al ruido y al estrés; esto lo estamos viendo cada día en los gimnasios, balnearios urbanos (spa) e incluso supermercados.

Y esta es mi breve reseña de este magnífico compositor que, además, tiene su vertiente humanitaria, colaborando en causas de tipo social; un artista que no tengo constancia de que haya tocado en España, pero que sí que es relativamente conocido en su país. Pues eso, siéntense, escuchen y disfruten.

Comentarios

EDUARDO DE URUGUAY ha dicho que…
HOLA AMIGO DISCULPAS POR RESIEN VER Y CONOSER TU BLOG Y POR FIN ENCUENTRO CON UNO QUE TIENE MUY PARESIDO A MIS GUSTOS MUSICALES, CUANDO VI A JARRE Y AZUL Y NEGRO ME DIO POR LEER MAS DE TUS PUBLICACIONES Y CONOSER NUEVAS MUSICAS, Y ME GUSTO ESTE SEÑOR MICHEL PEPE Y TE VOY A PONER EN MIS BLOG PREFERIDOS PARA LEER MUCHO MAS DE TUS GUSTOS Y SEGURAMENTE ME VAN A GUSTAR TODOS, GRACIAS POR DAR TUS CONOSIMIENTOS MUSICALES, LOS MIOS SON MUY VARIADOS Y LOCOS, GRACIAS