EL HOCKEY SOBRE HIELO EN ESPAÑA CRECE (IX)

Si hace unos años, cuando empecé la andadura de este blog y me fui haciendo con «mis temas favoritos», hubiera pensado que el pequeño deseo que ahora relataré se iba a hacer realidad, casi seguro que me hubiera llamado a mí mismo loco o tal vez iluso, aunque tal vez haya sido un definitivamente un loco visionario.

Lo cierto es que el seguimiento de las competiciones internacionales de selecciones en hockey sobre hielo y sobre todo lo que se cuece en España tanto a nivel de combinados nacionales como de clubes, es algo que me mantiene al día de la actualidad buena parte del año, y esa afición la he ido cebando con el tiempo, hasta el límite de cierto friquismo.

Y aquel deseo lejano cuajó; yo podría estar esperanzado en que algún siglo de estos algún Mundial cayera por España (alguna vez lo anunciaba en mis entradas cuando se programaba en Granada) y acudir al menos a un partido. Lo de Granada fue un fiasco tras otro, porque la gestión previa a la Universiada de 2015 fue un poco nefasta y esos intentos por preparar las instalaciones de cara a ese evento como una especie de pistoletazo de salida o puesta de largo con un Mundial de categorías inferiores sub 20 o sub 18 fue cayendo en saco roto. La fortuna es que al menos tras la Universiada se quedó una estructura permanente, el Igloo Granada Ice Arena en el Centro Comercial Kinépolis que, en realidad, pertenece al término municipal de Pulianas.

Yo ya sabía que el Mundial absoluto sénior masculino de este año en el que participaba España, el de la división IIB se iba a celebrar en Granada, aunque no las tenía todas conmigo ante los fiascos anteriores, pero esta vez fue que sí y pude cumplir el sueño, además acompañado de la mejor manera posible, con mi hijo. Al Igloo Arena fuimos el sábado 14 de abril con bandera patria en ristre para presenciar la disputa del España contra Corea del Norte y mi alegría en la previa, durante y el postpartido era tal que no cabía en mí, y sí lloré, soy así de friqui.

Esta vez puedo decir y enorgullecerme de ello que todas las fotos de esta entrada fueron hechas por mí y, por supuesto, tengo que empezar por este partido, puesto que aunque yo ya había ido una vez en Noruega a un partido de hockey, verlo en un escenario más pequeño y coqueto como el Igloo Arena era todo un lujo, porque en el tercer tiempo mi hijo y yo nos bajamos a la pista y pudimos hacer fotos pegados a las mamparas, sintiendo los golpes de los jugadores contra ellas, el estremecerse las protecciones ante la descomunal velocidad de lanzamiento de los discos.

Antes de eso, justo cuando aparcamos el coche, casi en la misma puerta de la instalación, estaba toda la selección española calentando en los aledaños, y también saqué unas buenas fotos; toda una suerte, toda una emoción, allí estaban los Pablo Puyuelo, Oriol Rubio, Patricio Fuentes, Ander Alcaine…, esos a los que he seguido durante años por Internet y ahí estaba yo, anónimamente, disfrutando como un niño, como nadie disfrutó aquella noche en este evento, estoy convencido; no creo que los jugadores se dieran cuenta de que tenían ante sí a un fanático incondicional.

Fue también casualidad que ese partido cayera en fin de semana, el que nos venía bien para ir, porque los otros fueron un domingo y días laborables, y que fuera ante una selección teóricamente asequible; yo aventuraba a mi vástago que ganaríamos anotando en torno a una decena de goles, y no iba descaminado, porque la diferencia de calidad entre españoles y norcoreanos fue tal que se sucedieron no solo los goles, sino muchas ocasiones, lanzamientos, acciones espectaculares, con lo que podemos decir que el partido fue muy entretenido; la victoria final por 15 a 1 lo dice todo.

Como curiosidades puedo señalar que nos compramos un disco de verdad, en el stand que había dentro del palacio de hielo y que en el primer tiempo se sentó a mi lado casualmente el ayudante de entrenador de la selección mexicana Rodrigo Gutiérrez Porter, con el que pude conversar durante un rato mientras este tomaba notas y los números de las camisetas de determinados jugadores norcoreanos.

Aquel partido fue el inicio de una semana exitosa, tal y como se preveía, porque hay que decir que España había fallado el año anterior, perdiendo la categoría IIA de forma estrepitosa, esa que por nivel le corresponde sin lugar a dudas, y continuó una racha victoriosa en la que encadenó victorias ante Luxemburgo (10-1), México (14-0) e Israel (4-0); prácticamente seguí todos los partidos por Internet, o en la transmisión en directo por streaming, es decir, emisión en directo del partido por el canal de la IIHF; o hice el seguimiento a través de su web, que actualiza la información minuto a minuto, algo buenísimo y que muchos deportes debieran copiar. La gran final estaba servida y aunque España sudó más de lo debido, pues Nueva Zelanda está elevando su nivel en los últimos años, siempre fue mandando en el resultado y al final se impuso por 6 a 4 culminando un torneo y una temporada exitosos para el hockey hielo de nuestro país.

Una selección interesante para el futuro que ya contó este año con jugadores sub 20 e incluso un sub 18; la media del equipo dirigido por el italiano Luciano Basile fue de 23 años y con este dato y con la cantera que viene por detrás podemos soñar con que el hockey sobre hielo en España siga creciendo en los próximos años.

Casi he comenzado por el final porque con el ascenso de España en categoría absoluta no hacía más que culminar una temporada histórica, porque ya desde la campaña pasada nuestro país compite, con el debut del combinado sub 18 femenino en todas las categorías posibles de la IIHF; pues bien, en categoría masculina las tres selecciones han conseguido el ascenso, el de los absolutos era más que previsible, pero en sub 18 y sub 20 lo han logrado brillantemente partiendo de la categoría que nos corresponde por nivel, por lo que el año que viene nos toca codearnos con rivales mucho más duros, va a ser apasionante. Pero es que en categoría femenina las sénior también conseguían un ascenso más que perseguido y anhelado durante varias temporadas; las únicas que fallaron fueron las sub 18, todo se andará.

Tamaño éxito concentrado no ha pasado desapercibido a la IIHF que sacó una noticia en su web destacando los avances del hockey hielo en España en esta temporada, cuatro ascensos en cinco Mundiales es un logro que jamás se había dado en la historia reciente de este deporte en todo el mundo. Sí, ya sé que estamos en unas divisiones donde puede haber cierta asequibilidad por los rivales a los que te enfrentas, pero no hay lugar a dudas de que no es fruto de la casualidad que justo este año 2018 hayamos conseguido este impulso, por eso hoy o este curso reivindico con más fuerza que ningún año el título con el que denominé esta entrada anual fue más certero, o sea, que el hockey sobre hielo en España crece y esta vez sí que sí.

Bien, pues por concluir con la información sobre nuestra selección absoluta masculina, en la próxima temporada tiene que empezar a recoger algún fruto de las nuevas generaciones y, por lo menos, debe intentar no fallar, un año o un par de años de transición no estarían mal, hasta que los chavalines que vienen desde abajo (algunos ya han actuado este año) empiezan a madurar. Para ir perfilando el futuro, el próximo Mundial IIA se celebrará en abril de 2019 en Belgrado (Serbia) y nos veremos las caras con los anfitriones más Croacia, China, Bélgica y Australia. En teoría hay que aspirar a no complicarse la vida y que chinos y australianos se diriman el último puesto.

Continuando con el análisis de las selecciones masculinas, más potentes como ya he apuntado, fueron los logros de las selecciones sub 20 y sub 18, porque jugamos contra rivales de «nuestra liga» y los superamos; el ascenso es dar un salto cualitativo fundamentalísimo para crecer en nivel y enfrentarse a rivales de más entidad. En un deporte tan deficitario en España como este casi más importante que ganar es de vez en cuando perder, porque estoy convencido de que a estos niveles en hockey hielo se aprenden más de las derrotas que de las victorias, siempre y cuando el rival que tengas enfrente sea mejor que tú.

Comencemos por el sub 20, España jugaba a principios de enero en Belgrado y el rival a batir era en teoría Croacia. Iniciamos la competición con un plácido triunfo ante México por 4 a 0 y en esa primera jornada ya se dio la relativa sorpresa del triunfo de los anfitriones ante los croatas, por lo que nuestro partido de la siguiente jornada ante Serbia casi se convirtió en una final anticipada.

Aquel partido fue durísimo, comenzamos adelantándonos en el electrónico al filo de la conclusión del primer período y el marcador no se movió hasta el tercer tiempo cuando los serbios nos hicieron un gol de esos que hacen mucho daño, un gol en inferioridad numérica, y a nueve minutos del final otro tanto, esta vez en superioridad. Con todo el equipo volcado sobre la portería centroeuropea, en el último suspiro del encuentro, a un minuto del final y con situación de superioridad anotábamos merced al madrileño Alfonso García para empatar la contienda. Hubo prórroga sin goles y en los penaltis también la igualdad fue la nota predominante, tras los cinco lanzamientos de cada equipo, como en el fútbol, solo se anotó un gol por cada seleccionado (a diferencia del fútbol en el hockey hielo esta es una suerte donde la estadística señala que es más habitual fallar que marcar); hasta que en los lanzamientos el jugador del FC Barcelona Jordi Cerdá daba el triunfo por 3-2 a nuestro seleccionado.

En el tercer encuentro nuestros chicos se deshacían de Turquía por un cómodo 7 a 2, y en el cuarto también superaban a Bélgica por 9 a 3.

En el último encuentro todo estaba por decidir, los croatas ya no podían luchar por el ascenso, pero una derrota nuestra pondría en bandeja la medalla de oro para los serbios que tenían un encuentro fácil ante Turquía. Los nuestros no se amilanaron y salieron a la pista a ganar desde el principio, no fue fácil, pero los croatas sucumbieron ante el poderío hispano que lanzó a portería el doble de veces que su rival, dominio abrumador que no se reflejó de forma proporcional en el resultado final, nos fuimos con 1 a 0 en el primer período, en el segundo empatarían los croatas y en el tercero anotaríamos nosotros a trece minutos del final. Los croatas forzaron la máquina y en el último minuto vaciaron la portería para tener un jugador más de ataque, el riesgo es que como pierdas el disco, ya sabes que la meta está franca y fue lo que sucedió, a los pocos segundos de la nueva situación nuestros contendientes cometieron un error y nuestro joven Dorian Donath Sánchez (forjado en tierras suecas), atentos a este nombre en el futuro, marcó a placer para establecer un definitivo 3 a 1 en el luminoso, que cerraba un torneo fantástico, oro y ascenso.

Este ascenso implica codearse con duros rivales, pero el reto está aceptado y lo vamos a luchar; el Mundial IIA del próximo año se celebrará en Dumfries (Reino Unido), y aparte de los anfitriones tendremos que enfrentarnos a Lituania, Corea del Sur, Estonia y Rumanía. Con una victoria podría ser posible mantener la categoría si se dan otros resultados, y nuestras opciones pasan por superar a estonios o rumanos, que son los que están más cerca de nuestro nivel.

Los sub 18 no quisieron ser menos que sus hermanos mayores y dos meses después se presentaban con ilusión en el Mundial IIB que se celebraba en Zagreb (Croacia) en una competición que se avecinaba sumamente apasionante. Iniciamos el torneo con una clara victoria ante Islandia por 8 a 3, y en la segunda jornada, casi por arte de magia, y como ocurriera en el Mundial sub 20 nos vimos las caras con Serbia y ocurrió casi lo mismo, o al final el mismo resultado. Al final de la primera parte se llegó con empate a uno, en la segunda se adelantarían los serbios y España empataba a diez minutos del final. Nos fuimos a la prórroga y no hubo goles, así como en el sub 20 acudimos a los penaltis, y esta vez en la tanda de cinco lanzamientos para cada equipo España lograría perforar la portería en dos ocasiones por una de los serbios, así que resultado final de 3-2.

Un pequeño gran paso para seguir orientando de forma positiva la clasificación. En la tercera jornada no tuvimos problemas para desembarazarnos de China por un solvente 7 a 3. En la cuarta jornada se presagiaba un partido complicado contra Holanda (una Holanda fuera de sitio en esta categoría pero que en los últimos años está bajando su nivel), y lo bueno es que fuimos por delante casi todo el encuentro, nos adelantamos 2 a 0 en la primera parte, en la segunda empatarían los neerlandeses, pero antes de acabar esta nos volveríamos a poner con 3 a 2. En el último período hubo intercambio de goles, gol de España (4-2), Holanda (4-3), España (5-3) y finalmente gol de Holanda para un favorable resultado de 5 a 4 para nuestros intereses. El último partido ante Croacia, los anfitriones, era una especie de gran final, aunque matizada, porque con los resultados previos que se habían dado a España le valía cualquier victoria, pero también cualquier derrota que se produjera después del minuto 60, sí porque en hockey se otorgan tres puntos por victoria en tiempo reglamentario y cero para el perdedor, pero dos puntos por victoria en tiempo añadido o penaltis y uno para el perdedor. Como España ya tenía en esa jornada once puntos y Croacia ocho, sumando uno más ya le valía. Nuestros chicos, sin embargo, no tuvieron que acudir a tales cábalas e hicieron un encuentro primoroso, dominando de principio a fin, 1 a 0 al final del primer período, se aumentó la distancia en el segundo con 3 a 0 en el marcador, y un parcial de empate a uno en la última parte dejaba el marcador en el 4 a 1 definitivo. Otro oro, el segundo, que con el conseguido en Granada por los grandes, han dejado esta temporada histórica de plenos para los conjuntos masculinos.

El próximo Mundial IIA tendrá lugar en Elektrenai (Lituania), junto con los locales nuestros chicos tendrán que medirse a Corea del Sur, Polonia, Rumanía y Estonia. Nuevamente como ocurre con los sub 20 nuestros rivales a superar serán rumanos y estonios.

Pasando a las selecciones femeninas, tuvimos también el éxito de la selección absoluta que disputaba un Mundial IIB algo a la medida pues se trajo a Valdemoro (Madrid). Con algún que otro escollo se fueron superando rivales, 2 a 1 a Islandia, 4 a 1 a Turquía, 12 a 0 a Rumanía, 6 a 1 a Taiwán y finalmente 5 a 2 ante Nueva Zelanda, que otrora el rival más fuerte, pero que en esta ocasión la plata correspondió a las taiwanesas. Un ascenso muy deseado para una selección que lo ha buscado ansiadamente durante años y que sí tiene posibilidades reales de mantener una categoría superior a esta. Las cosas en categoría femenina se están haciendo razonablemente bien y la cantera está creciendo.

El Mundial IIA, categoría donde debutarán nuestras chicas el próximo año, se celebrará en Dumfries (Reino Unido), y nuestras contrincantes serán amén de las británicas, Corea del Norte, Australia, Eslovenia, México, y a excepción de norcoreanas y británicas, nuestro seleccionado tiene potencial para pelear los otros tres partidos restantes, por lo que las posibilidades de permanecer en la categoría son absolutamente reales.

El único borrón, lógico por otra parte, de esta temporada fue el de la selección sub 18 femenina en la denominada División IB (calificación); en su segunda incursión tras el debut de la temporada pasada. El Mundial se disputó en México y ya se empezó con una decepcionante derrota ante Holanda por 4 a 2. En la segunda jornada volvíamos a perder, esta vez con México por 4 a 1, con lo que cualquier posibilidad de ascenso ya se había esfumado. No obstante, maquillamos bastante bien nuestra participación con sendas victorias ante Turquía (10-0) y Kazajistán (3-1), para lograr una valiosa medalla de bronce.

Este Mundial nos lo traemos en 2019 para España, en concreto a Jaca, va a ser una competición muy reñida y apasionante, se juntarán siete equipos, imagino que se hará un grupo de tres y otro de cuatro. Las participantes serán aparte de nuestras jóvenes, Australia, Turquía, Kazajistán, México, Corea del Sur y Taiwán. Australia será el rival a batir porque es el descendido y las mexicanas sin el factor cancha deben ser asequibles, del resto de selecciones es una incógnita, a Kazajistán y Turquía ya las superamos este año, pero de las dos selecciones asiáticas debutantes es difícil de presagiar su nivel, máxime cuando esta categoría está en constante renovación de generaciones.

Pasando ya a las competiciones internas de clubes en la Liga Nacional volvimos a tener cinco equipos, en la liga regular dominó con cierta solvencia el Txuri Urdin de San Sebastián, seguido de cerca por Jaca, tercero y cuarto fueron FC Barcelona y Majadahonda; el quinto fue un Puigcerdà que está en horas bajas. En el playoff semifinal Txuri y Jaca se deshicieron por 2 a 0 de FC Barcelona y Majadahonda. En la gran final los vascos no dieron opción alguna venciendo por 3 a 0, ganando el primer partido en casa y los dos a domicilio en tierras aragonesas y con cierta contundencia, revalidando así el título de la pasada campaña.

En cuanto a la Copa del Rey si en la temporada pasada los jacetanos se resarcieron de su derrota en la Liga, esta vez sucumbieron ante el poderío del conjunto donostiarra del Txuri Urdin que venció en la Final a 4 disputada en su propia pista. Con este doblete el club vasco se convierte en el dominador sin discusión del hockey hielo en nuestro país en la actualidad.

Dicho equipo disputó la competición europea de la Continental Cup grupo C en Brasov (Rumanía) y como siempre el objetivo era aprender y no desentonar. En el primer partido se midió a los húngaros del Jegesmedvek Miskolc perdiendo por 5 a 0 (estos serían los vencedores del torneo). En el segundo encuentro caerían por 4 a 1 ante el Corona Brasov rumano. Y en el tercer y último choque se impondrían a los serbios del Estrella Roja de Belgrado por 3 a 2.

En la segunda competición masculina, la Liga Nacional Junior, tuvo como vencedor a La Nevera Majadahonda, los madrileños están haciendo muy buena cantera y en los próximos años van a sonar sin duda, aunque más si cabe que ellos el FC Barcelona, y preveo que en un lustro los catalanes volverán a comandar las competiciones absolutas. El conjunto majariego se impondría, del mismo modo, en la competición copera. Un muy buen doblete para sus vitrinas.

Por lo que respecta a las féminas, la Liga Nacional repitió con siete equipos ya consolidados, que no está nada mal y aquí las claras dominadoras, al igual que ocurriera en la temporada 2016/17 fueron las madrileñas de la SAD Majadahonda venciendo a CH Huarte en el playoff final, y superando al ASME Barcelona en la Copa.

Por último, siempre me gusta hacer una breve mención de las competiciones absolutas en categoría absoluta, esta vez no solo con un interesantísimo Mundial jugado en Dinamarca, sino con la competición olímpica donde también hubo una competición trepidante.

Parece que, de algún modo, algo se mueve en este deporte a nivel élite. En los Juegos Olímpicos ya percibimos que los favoritos fallaban, especialmente decepcionante Canadá y Estados Unidos, y en la final se presentarían rusos y alemanes, estos últimos la grandísima revelación. Este año Teledeporte ha optado con acierto con retransmitirnos partidos de Juegos y del Mundial y, por supuesto, entre ellos las dos finales.

En la final olímpica de Pyeonchang (Corea del Sur), nunca los alemanes tendrán más cerca el oro, se pondrían 3 a 2 a tres minutos y quince segundos del final, las cosas se les pondrían más de cara porque obtendrían superioridad a dos minutos y diez segundos del final; pero cuando todo parecía estar hecho, los rusos vaciarían la portería para volver a tener equilibrio en el campo, aunque con el riesgo de tener la portería franca, y fueron capaces de perforar la portería teutona por medio de su jugador franquicia Nikita Gusev cuando quedaba menos de un minuto para el término. En la prórroga los rusos volverían a anotar el gol de oro y dejaron a los alemanes con la miel en los labios.

En el Mundial volverían a fallar canadienses y estadounidenses, algo no frecuente, especialmente por los primeros, y la final la disputarían suecos y suizos, en este caso, la revelación fue la selección suiza que se había deshecho de Canadá en la semifinal. También acarició el oro Suiza pues el partido en su tiempo reglamentario más la prórroga concluyó en empate, y solo pudieron los suecos, también llamados selección Tre Kronor, imponerse en el lanzamiento de penaltis.

Estaremos atentos a ver lo que nos depara la temporada 2019, va a estar plena de actividad y emoción.

Comentarios